Registro fósil ordenado por edades geológicas, revelando la evolución de la vida a lo largo del tiempo geológico.
Publicación
A Mammalian Lost World in Southwest Europe during the Late Pliocene
Arribas A, Garrido G, Viseras C, Soria JM, Pla S, Solano JG, Garcés M, Beamud E, Carrión JS (2009) A Mammalian Lost World in Southwest Europe during the Late Pliocene. PLoS ONE 4(9): e7127. doi:10.1371/journal.pone.0007127
Publicación
A stratigraphic framework for the Pliocene-Pleistocene continental sediments of the Guadix Basin
Pla-Pueyo, S., Viseras, C., Soria, J.M., Tent-Manclús, J.E. and Arribas, A. 2011. A stratigraphic framework for the Pliocene-Pleistocene continental sediments of the Guadix Basin (Betic Cordillera, S. Spain). Quaternary International, 243(1):16–32.
La interpretación bioestratigráfica histórica del registro fósil europeo nos llevó en un principio, en función de los FAD’s (First Appearance Data) y los LAD’s (Last Appearance Data) de distintos taxones identificados en el yacimiento, a situar a Fonelas P-1 en un intervalo cronológico definido entre -1.9 Ma y -1.7 Ma. Esta era la postura más prudente pues se consideró poco parsimonioso pensar que Fonelas P-1 fuese más antiguo que la unidad Olivola (Olivola FU; -1.9 Ma), unidad faunística italiana que presentaba los FAD’s de distintas especies de grandes mamíferos presentes en el yacimiento granadino, oriundas de Asia. Esta consideración cambia con los datos magnetoestratigráficos obtenidos durante el año 2007, con los que se situa la cronología de Fonelas P-1 en los 2 millones de años de antigüedad.
El análisis integral de la información obtenida a partir de la asociación paleomastológica recuperada en FP-1 permite:
- integrar en uno los eventos de dispersión tradicionalmente asignados a las FU’s Olivola y Tasso;
- establecer que la singular asociación de FP-1 es ligeramente más antigua (-2.0 Ma) que las de Olivola + Tasso FU;
- constatar el notable incremento de los FAD’s entre Senèze y Fonelas P-1 (Sondeo B), esto es, entre 2.1 – 2.0 Ma;
- verificar la existencia de la biozona MNQ18 en cronologías más antiguas que Olduvai; y
- plantear la hipótesis de la existencia de un único evento dispersivo (The Pre-Olduvai (C2r.1r) dispersal event) entre 2.1 y 2.0 Ma de antigüedad que integraría a los grandes mamíferos asiáticos y africanos que venían caracterizando al Wolf dispersal event (1 en la figura) más aquellos asociados al Homo dispersal event (2 en la figura), al que se suman otros nuevos protagonistas identificados gracias al singular registro de FP-1. Futuras investigaciones de los yacimientos integrados en el marco de este proyecto permitirán verificar la presencia de homínidos en la Cuenca de Guadix en tan tempranas cronologías.
Por otra parte, el conjunto de hallazgos e investigaciones realizadas en el marco del Proyecto Fonelas desde el año 2001 permite identificar en la Cuenca de Guadix un conjunto de cuerpos de roca con una potencia media de 6 m, localizados entre las cotas topográficas 920-940 m de altitud, que contiene información de calidad sobre las faunas de mamíferos del inicio del Pleistoceno: Zona MNQ17 (FSCC-3, FSCC-2 y FBP-4), Zona MNQ18 (Fonelas P-1 y FSCC-1) y Zona MNQ19 (FBP SVY-1, M-8 y M-9). Dicho conjunto geológico ocupa una superficie mínima de 40 km2 y comprende aproximadamente 240.000.000 m3 de volumen de rocas sedimentarias con registro estratigráfico de los ambientes y subambientes ecológicos de este intervalo de tiempo y el registro fósil de los mamíferos que caracterizaron los ecosistemas terrestres.
Fonelas P-1 sintetiza, en un único suceso, dos eventos de dispersión históricos, dentro de la clásica MNQ18, sin que la asociación faunística de esta zona sea la estándar. El conjunto de nuevos yacimientos permite identificar en la misma sucesión general las zonas MNQ17, MNQ18 y MNQ19; y aporta al debate indicios indirectos de presencia humana en cronologías próximas a los 2 Ma de antigüedad en el margen suroeste de Europa. La posición geográfica de estos registros españoles abre nuevas incógnitas de naturaleza paleogeográfica, ya que en el suroeste del continente europeo se encontrarían los primeros registros de especies supuestamente oriundas de Asia, y entre el Cáucaso y la Península Ibérica no se conocen otros testimonios fósiles de este acontecimiento.