El agua subterránea es un recurso natural renovable,
aprovechado por el hombre. Su utilización es muy beneficiosa y contribuye a
satisfacer las demandas creadas por él, y a mejorar su bienestar social,
económico, cultural y lúdico.
Con el transcurso de los
años las exigencias del hombre han sido mayores. Así, la sociedad actual no sólo
exige agua en cantidad suficiente (es impensable en el mundo desarrollado la
falta de agua en un hogar), sino que ésta debe tener una calidad acorde con el
uso al que se vaya a destinar. Esta condición hace que el agua subterránea, por
su excelente calidad y protección frente a su posible contaminación, juegue un
papel relevante en el abastecimiento urbano; situación que en España, no se da
con la misma importancia cuantitativa, que en otros países de nuestro entorno
socio-económico.
Apoyo al abastecimiento
de la Bahía de Cádiz en la sequía del período 1992 a 1995, mediante bombeos en
el acuífero Arcos-Bornos. Se suministraron 500 L/seg que se incorporaron
directamente al abastecimiento, aprovechando la infraestructura de distribución
a partir del embalse existente aguas arriba del acuífero