Los pozos modernos requieren una sofisticada tecnología en
la que se precisa un diseño técnico adecuado de la captación, así como un
conocimiento detallado del acuífero. Con frecuencia se subestima la importancia
que tiene un buen diseño y construcción de un pozo. La duración de un pozo y la
eficacia son función directa de la calidad de los materiales empleados y de la
tecnología utilizada. Algunos de los problemas que se suelen imputar a los
abastecimientos servidos con aguas subterráneas son debidos, muchas veces, a una
defectuosa construcción y/o mantenimiento inadecuado de las captaciones, y no a
los acuíferos. Hoy día se cuenta con tecnología muy avanzada que hace de los
pozos una verdadera obra civil, que requiere diseño, proyecto, mantenimiento y
observación.
Los métodos de
perforación más utilizados en la actualidad son la percusión, la rotación, y la
rotopercusión:
• La perforación a
percusión consiste en el golpeo repetido de la roca mediante un trépano* hasta
machacar totalmente la roca, para luego ser extraída a la superficie mediante
una herramienta denominada cuchara. Este sistema ha sido utilizado para pozos en
cualquier tipo de material geológico aunque, dependiendo del tipo de roca, puede
presentar mayor o menor dificultad de perforación. Está especialmente
recomendado para perforaciones en acuíferos consolidados (mármoles, calizas,
dolomías, areniscas cementadas, entre otros); sin embargo muchos pozos en
formaciones no consolidadas constituidas por gravas, están construidos con este
sistema; el resultado de la perforación depende en gran medida de la experiencia
del perforista.
• La perforación
a rotación consiste en la trituración de
la roca por medio de un útil de corte que
normalmente contiene una cabeza giratoria que
desgasta la roca. El material
triturado es extraído del
sondeo