P.N. de Doñana

50 La gran extensión de la cuenca del Guadalquivir, y la diversidad de los relieves de borde, condicio- na que la serie estratigrafía general varíe de unos sectores a otros de la cuenca. En el ámbito del Bajo Guadalquivir el relleno de la cuenca se inició hace casi 11 m.a., en el Mioceno, aflorando actualmente en superficie tan sólo los materiales correspondientes a la parte superior (de edad Tortoniense superior- Messiniense). El inicio de la sedimentación pliocena en la zona de Huelva se realizó más tarde, cuando la cuenca marina ya estaba configurada. En el entorno de Huelva, y de muro hacia techo, se han definido dentro de la Cuenca del Guadal- quivir, las unidades litoestratigráficas que se describen seguidamente. En conjunto, la potencia de estas unidades puede llegar a superar los 500 metros. Formación Niebla La Formación Niebla, a la que se le asigna una edad Tortoniense superior, está constituida en su base por 10-20 metros de arenas y conglo- merados de origen fluvial y deltaico. Encima aparecen unos 30 metros de calcarenitas y calizas, muy ricas en fauna, interpretadas como antiguos sistemas costeros y marinos de plataforma interna y media. La transición hacia la unidad superior, la denominada Formación Arcillas de Gibraleón viene dada por un nivel de limos con glauconita muy ricos en microfauna planctónica, así como en dientes de seláceos y en restos de cetáceos (vértebras y costillas). Se interpreta como un nivel de condensación marino. En el sector occidental de la provincia, al oeste del Río Odiel, la Formación Niebla se hace eminentemente siliciclástica, compuesta exclusivamente por arenas, conglomerados y limos de naturaleza deltaica y marina somera. Formación Arcillas de Gibraleón Está formada por una serie de arcillas y margas ricas en microfauna planctónica y bentónica de edad Tortoniense superior-Plioceno inferior, . Presenta una gran potencia, que se incrementa hacia el centro, sur y sureste de la cuenca. Se asocia a medios marinos profundos, localizán- dose su máximo batimétrico próximo al talud. Contiene, además, intercalaciones de arenas y limos que han sido interpretados como sistemas turbidíticos relacionados con descensos del nivel del mar durante el Messiniense. Hacia techo presenta un carácter bastante somero. La existencia de niveles muy ricos en icnofósiles ha permitido interpretar sus condiciones de FORMACIONES RECIENTES DEL BAJO GUADALQUIVIR SEDIMENTOS NEÓGENOS Calcarenitas Afloramiento de arcillas FORMACIONES RECIENTES DEL BAJO GUADALQUIVIR